En
tantos momentos que vivimos la realidad que pasa ante nuestros ojos es más
compleja de lo que podríamos imaginar, todavía en este país existen lo
indigentes, los niños de la calle, quienes tienen que mendigar para conseguir
un pan, y aun cuando a unos pocos es posible que la vida les cambiara por
alguna dádiva que le asigna el Estado, continuo creyendo que es poco lo que se
sigue haciendo. Mecanismos creados para empobrecer más un país en nombre de la dignificación
del hombre. Personas desesperadas por ubicar una medicina, pero no es por no
tener el dinero, es porque no la hay.
Hace
poco encontré a una persona pidiendo comida a la salida de una cafetería, le ofrecí
algo para comprar al menos un bocado para su momento y me respondió “Tú me
diste menos que el anterior, pero te lo agradezco más pues tu voluntad fue
sincera y no te dio asco acercarte a mí”, esas palabras parecieron en algún momento
como sacadas de un guion, pero las escuche de aquel hombre enfermo y golpeado
por la necesidad.
Pero
su mensaje me llevo a reflexionar sobre el país, y no se trata de una cultura
de la limosna, se trata de una situación que solo falta poco para que nos
asfixie sin remedio, cuanto hacemos por la vida en espera que el lugar de cada
uno pueda recoger lo que a diario sembramos, pero donde queda la semilla de
quien forjando un futuro le arrebatan la oportunidad de seguir adelante pues la
empresa cerrara, se marchara del país, no tiene como traer materias primas, no
pude mantener los precios por falta de estabilidad.
Cuando
el Estado se muestra dispuesto a un cambio, solo creo que se mueve de escenario
pero mantiene su errática conducta, hace poco vi en televisión como el segundo
hombre del Estado se admiraba al ver el paredón donde Bolívar mando a fusilar
al General Manuel Piar, por las razones conocidas, pero esto personero lo hizo
y luego manifestó que la lealtad al presidente era incondicional….habrá que ser
tonto para no ver el mensaje real, en momentos que algunos de los clásicos hombres
del gobierno han sido lanzados como desperdicio al vacío del abismo. Entonces qué
sociedad están formulando? Cuál es el mensaje reparador de paz?
El
paredón al que nos envían a diario es el irrespeto, la intolerancia, la
amenaza, la coacción, el manejo mediático oscuro, la escases, la inflación, el
oscuro escenario de la delincuencia, de la forma como desarman la economía con
dinero inorgánico, y posiblemente cuando hable con aquel hombre que pedía para
comer, solo estaba en presencia del futuro más cercano al cual no quieren
exponer. En este país hay miles de hombre y mujeres que pueden construir más de
lo que los vulgares acólitos del Estado puedan imaginar, sus proyectos de
miseria ahora son parte de una de las escenas de la nueva versión de la Guerra
de las Galaxias, donde el jefe del imperio Dark Vader afila sus intenciones sobre el país.
Día
a día el paredón nos espera en una cola, en una calle donde podemos perder la
vida, en un hospital donde no es seguro enfermarse, en la puerta de un
cementerio donde no saben dónde te colocaran, en la llamada de un órgano de
seguridad para saber en qué gastaste los dólares cuando ni pasaporte ni tarjeta
de crédito tienes, de todas maneras iras preso mientras te las dan, el paredón nos
espera de alguna manera, pero tenemos……..no sé que tenemos…!